¿Renuncia o se lanza ? Leonardo Vargas en la encrucijada que sacude a la Fedefútbol
El fútbol costarricense vive uno de sus momentos más tensos tras la eliminación rumbo al Mundial 2026. En medio de las críticas, las peticiones de cambios inmediatos y un ambiente federativo convulso, todas las miradas se dirigen hacia Leonardo Vargas. El jerarca del Club Sport Cartaginés, quien además ocupa un puesto en la Fedefútbol, enfrenta una pregunta que ya retumba en los pasillos deportivos: ¿debe renunciar o postularse a la Presidencia?
Los estatutos de la Federación permiten que, en la próxima asamblea donde se ponga a disposición el cargo presidencial, Vargas pueda lanzarse formalmente como candidato. Sin embargo, su propio discurso lo pone en un dilema público: ha insistido en la necesidad de transparencia, liderazgo y responsabilidad dentro de la Fedefútbol, palabras que hoy lo obligan a definirse. ¿Será el momento de dar un paso irrevocable y dejar su puesto actual, o el instante ideal para encabezar un nuevo proyecto?
La salida de Osael Maroto, exigida por muchos sectores del fútbol nacional, podría abrir una ventana para un relevo de mando profundo. Vargas, figura influyente y voz fuerte en el balompié costarricense, tiene ahora la oportunidad —o la presión— de tomar una decisión que podría cambiar el rumbo de la Selección y del fútbol tico en general. El país espera. El balón está en sus pies.
