Daniel Jaen: El guardameta brumoso con roce internacional y un futuro brillante en el fútbol

En el vibrante mundo del fútbol, las historias de superación y conexiones inesperadas siempre encuentran una manera de brillar. Tal es el caso de Daniel Jaen, el talentoso portero del Club Sport Cartaginés y miembro de la selección nacional sub-20 de Nicaragua, gracias a su doble nacionalidad. En una charla exclusiva, Daniel nos cuenta su increíble travesía y las experiencias que el fútbol le ha regalado hasta ahora.

*Hola don Juan Carlos, un placer saludarle*, comienza Daniel, entusiasmado por compartir su historia. *Le comento cómo conocí a Douglas Forvis . Todo se dio desde el momento en que la selección de Nicaragua me contactó para formar parte de la selección sub-20. Aunque soy costarricense, mi bisabuelo paterno es nicaragüense, lo que me permitió ser elegible para representar a Nicaragua*.

La oportunidad surgió cuando el entrenador de la selección sub-20, quien también es el asistente técnico del Real Estelí, mostró interés en Daniel. *En ese momento, Douglas me contacta para saber más información sobre mí, ya que a él le habían preguntado por el motivo de mi posible convocatoria*, explica Daniel.

La conexión con Douglas se solidificó cuando el Real Estelí llegó a Costa Rica para enfrentarse a la Liga Deportiva Alajuelense en la CONCACAF. *Tuve la oportunidad de ir al hotel de concentración del Real Estelí, y ahí fue donde tuve el placer de conocerlo y agradecerle. Actualmente, estamos en constante contacto; es una gran persona y un gran amigo. Él es una de las personas que siempre me aconseja y me apoya mucho. Tenemos una gran amistad*, relata Daniel, destacando el apoyo y la camaradería que ha encontrado en Duglas.

Para Daniel, estas vivencias no solo fortalecen su carrera profesional, sino que también enriquecen su vida personal. La experiencia de jugar a nivel internacional y formar parte de dos culturas futbolísticas diferentes le ha permitido crecer tanto dentro como fuera del campo.

A medida que Daniel Jaen continúa su ascenso en el mundo del fútbol, su historia es un testimonio de cómo el deporte puede unir a las personas y abrir puertas inesperadas. Con su dedicación y talento, no cabe duda de que seguirá dejando una huella significativa en el fútbol costarricense y nicaragüense.

Daniel Jaen es más que un prometedor guardameta; es un puente entre dos naciones y un ejemplo de cómo las raíces familiares pueden influir en el camino de un deportista. Su amistad con Douglas y su incursión en el fútbol internacional demuestran que el talento, combinado con oportunidades y conexiones, puede llevar a lugares insospechados. El futuro de Daniel Jaen en el fútbol está lleno de posibilidades, y estamos ansiosos por ver qué más nos depara esta joven promesa