Crisis emocional  en Cartaginés: gestos vulgares y actitudes prepotentes eclipsan a jugadores brumosos.

La nueva era de Andrés Carevic al frente del Cartaginés comenzó con más sombras que luces, no  por el resultado en el terreno de juego, sino por la turbulencia emocional que atraviesa el camerino brumoso.

Un episodio polémico marcó la noche en el Ernesto Rohmoser, donde el arquero Kevin Briceño protagonizó un gesto vulgar hacia la afición que casi llenó el estadio pese al horario complicado, dejando en evidencia una desconexión entre Briceño  y los  aficionados 

A esto se suma el polémico actuar de Jostin Daly , quien sigue sin responder en la cancha y, tras el partido, optó por evitar a la Fuerza Azul Digital  con una actitud desafiante, incumpliendo el reglamento de Unafut al evadir las  preguntas en la zona mixta, un acto calificado como un irrespeto directo a la afición que merece recibir la información oportuna.

Más allá del juego, el club debe replantear con urgencia su enfoque emocional y disciplinario si aspira a sostener la ilusión de una temporada prometedora bajo la dirección de Carevic y el apoyo de la afición.